La familia es el teatro en el que estamos obligados a adoptar un papel sin haberlo elegido ni ensayado previamente. Como personajes, asumimos ese papel según las circunstancias, según el destino o la mera fortuna. Y el escenario es, apenas, una cuerda floja sobre la que debemos poner en juego nuestras capacidades con el solo fin de evitar caer al vacío. La familia es una obra teatral que dura la vida entera, una perpetua representación a merced de aplausos y abucheos.