En Lo primero que me viene a la mente, Juaco Vizuete se sumerge desnudo en la charca de la memoria, donde se imbrican hábilmente recuerdos de niñez con hechos que marcaron los años 70 y 80 en España: la llegada de las primeras revistas y películas pornográficas, el golpe de Estado del 23-F, los cines de verano, sucesos truculentos que marcaron las mentes, los cómics de aquella época...
Con Lo primero que me viene a la mente, propone un entrañable y divertido viaje a la infancia y la adolescencia, que se construye como una suerte de documental generacional, como el retrato de una época.