Kitty Norville jamás planeó transformarse en lobo en público, y menos aún en la televisión nacional, pero ahora que ha ocurrido necesita pasar un tiempo consigo misma para recuperarse del trauma y escribir sus memorias. Una cabaña en la montaña, lejos de la ciudad, parece el lugar perfecto donde recluirse. Pero tratándose de Kitty, los problemas siempre están al acecho. Primero alguien deja animales sacrificados de forma grotesca en su porche; después aparece el cazador de hombres lobo, Cormac, con una persona herida: Ben O¿Farrell, el abogado de Kitty. Dos tíos cañón y Kitty en una cabaña de una sola habitación, ¿podría darse una situación más tensa?